INTERIORISMO PERSONALIZADO A SU MEDIDA
Evite seguir los consejos de decoración hasta el punto de acabar con un espacio que no le parezca adecuado cuando se le ocurran ideas para el dormitorio. Por el camino, piense en lo que le atrae. Tu dormitorio debe ser acogedor y funcional para ti. Incluye cualquier preferencia que puedas tener, como plantas o cabeceros tapizados, en tus planes de diseño. Preste atención al techo. El techo es un fantástico recurso desaprovechado en cualquier espacio porque es la mayor superficie despejada de su dormitorio y la que la mayoría de los decoradores inexpertos simplemente ignoran. Considera la posibilidad de pintar o empapelar el techo de tu dormitorio con un delicado tono o estampado para darle un toque personal. Si está cansado de los esfuerzos de bricolaje y desea una decoración de dormitorio extra sofisticada, piense en instalar un techo moldeado. Piensa en un rincón. Tu dormitorio debe ser sagrado para ti, para que puedas relajarte en él. Si dispone de espacio y quiere añadir algo más para que su dormitorio se sienta como en casa, piense en crear un refugio tranquilo para usted. Los mejores lugares para pasar un rato a solas son un altillo, un asiento en la ventana o simplemente una silla cómoda y un reposapiés.
Cuando entramos en una impresionante habitación de hotel, enseguida observamos que todo está bien proporcionado y que la cama está exquisitamente construida. Los muebles, elegantes y útiles, adquieren un suave brillo gracias a la iluminación. La alfombra es perfecta para los pies descalzos, y las obras de arte son llamativas pero no abruman. ¿Y si amueblas tu propio dormitorio? Los propietarios de hoteles pueden diseñar las habitaciones para sus visitantes. Puede que se trate de algunos errores de diseño que los decoradores suelen advertir cuando entran en los opulentos dormitorios de sus clientes. Pequeños errores como ignorar el desorden o descuidar la iluminación ambiental pueden tener un gran impacto en el aspecto general de un espacio. Para averiguar los errores que nunca se deben cometer al diseñar un dormitorio, hemos hablado con algunos de los mejores interioristas del sector. Aunque no sea tan obvio como el tamaño de la cama, el tamaño de la alfombra en relación con la decoración y los muebles influye en el diseño. Elija una alfombra que sea al menos del tamaño de su cama; nunca tenga miedo de ir a lo grande. Ha elegido un tamaño que le permita levantarse de la cama y pisar la alfombra sin dificultad desde las cuatro esquinas. Una vez que hayas medido tus muebles y tengas espacio suficiente para caminar por tu dormitorio, es hora de pensar en el color. Elija una combinación de colores que se complemente sin ser demasiado estridente.
Como no siempre se duerme en el dormitorio, es fundamental disponer de varias fuentes de luz. Así podrá cambiar el ambiente según sus necesidades; por ejemplo, si lee en la cama por la noche después de un largo día, una luz más suave le ayudará a relajarse. Por otro lado, vestirse por la mañana se beneficia de una fuerte fuente de luz cenital que resalte su ropa diaria. Colocar la ropa de cama por capas es una forma estupenda de dar a tu dormitorio un aspecto más acogedor (y dinámico). Elige colores complementarios que contrasten y que puedas superponer por toda la cama. Utilice una variedad de texturas que expresen diferentes estados de ánimo para dar a la zona más textura y atractivo estético. Si se utilizan bien, los estampados pueden crear un efecto llamativo y hacer que la decoración sea divertida. Los cojines decorativos contrastan entre sí, y los dos diseños de rayas diferentes a los pies de la cama interactúan entre sí. El secreto del diseño de esta habitación es el uso de una variedad de estampados con texturas delicadas que, al combinarse, aportan componentes matizados al espacio.